Por ser domingo, voy a iniciar esta publicación con un regalo de mi amigo y compañero Federico Villalobos, quien reunió a Rose Mary Vargas de quien es esposo y sus dos hijos para interpretar la preciosa canción Pasión, orgullosamente parte del folclor costarricense. Sin embargo, anuncio que el resto de esta publicación es disonante con la belleza presentada por la familia Villalobos Vargas, porque hago una fuerte llamada de atención en relación con lo sucedido el pasado viernes 3 de abril, antes de que iniciara la restricción vehicular.
Por favor, escuchen y disfruten del talento de una familia que lucha con todos por salir adelante en estas horas negras de la historia de la humanidad.
Seguidamente, debo decir que para Costa Rica hoy termina el primer mes de pandemia activa. Recordamos que el primer caso detectado fue el 6 de marzo de 2020. Un día que quedará en la historia como el comienzo de una gesta que nos enorgullecerá (por el momento parece ser así) o lo recordaremos como el inicio de una gran tragedia, que ni Sófocles ni Esquilo ni Eurípides pudieron imaginar. Pienso que para ellos, y si no para mí, sería difícil imaginar condición más crítica para toda una sociedad. Es que estamos obligados a sacrificar mucho, algunos todo y otros hasta más que eso, para vencer al Covid-19. Durante todo el mes, en el territorio costarricense, ya hemos hecho una inversión inestimable desde el punto de vista social y económico. Todo para que no ocurra lo que ya está pasando en las grandes potencias del mundo occidental. Solo hay que echar una mirada al cuadro siguiente:
Country, Other | Total Cases | New Cases | Total Deaths | New Deaths |
---|---|---|---|---|
World | 1,201,453 | +84,810 | 64,688 | +5,801 |
USA | 311,357 | +34,196 | 8,452 | +1,331 |
Spain | 126,168 | +6,969 | 11,947 | +749 |
Italy | 124,632 | +4,805 | 15,362 | +681 |
Germany | 96,092 | +4,933 | 1,444 | +169 |
France | 89,953 | +7,788 | 7,560 | +1,053 |
China | 81,639 | +19 | 3,326 | +4 |
Reporte de casos de coronavirus enhttps://www.worldometers.info/coronavirus/ para el día de ayer, tomado el 5 de abril de 2020, 7:50 am.
En esta historia habrá héroes, como en las tragedias griegas, pero en este drama los héroes sí son de carne y hueso, no tienen superpoderes, como sí tenía Aquiles, para quien solo el talón era débil. Esos héroes, los de ahora, son más parecidos a Juan Santamaría, hombre que se sacrificó por salvar las vidas de todos los otros soldados costarricenses en la batalla de Rivas, el 11 de abril de 1856.
Abajo coloco un vídeo donde el Dr. Marco Vinicio Boza, internista e intensivista de la CCSS, nos hace el llamado que creo debe ser observado por todos y si lo ven no será necesario que yo me extienda más.
Si antes de continuar leyendo y viendo esta publicación vieron el vídeo del doctor, tendrán claridad de la importancia del 6 de abril, día en el que iniciará el segundo mes del Covid-19 en Costa Rica y la importancia del aporte individual, para que no necesitemos héroes, para que no haya personas que no contribuyan y disparen el contagio de la enfermedad.
Me resulta interesante el análisis expuesto en el próximo vídeo. En él se explica por qué parece que nuestro mundo occidental está zozobrando ante el virus que nos enferma con Covid-19, pero en el mundo oriental parece que lograron resistir y llegar a aguas más tranquilas. Por favor, véanlo seguidamente.
Al escuchar el análisis, que hace la persona que nos dirige la palabra (disculpen, no se su Al escuchar el análisis queda claro que una vida más disciplinada ha jugado a favor de los orientales y, nuestro desdén a la autoridad, nuestro orgullo por no someternos a los designios de nuestros líderes (gobernantes o líderes sociales), por lo menos bajo estas circunstancias, nos enfrenta a una situación en la cual paradójicamente necesitamos olvidar las teorías conspirativas y acatar con cuidado las medidas que nos pide, en este caso, el Sr. Ministro Salas y dejar de lado esa curiosa forma de ver y pensar.
Para marzo y abril se nos ha enseñado que debemos recordar el año de 1856 y los héroes Para marzo y abril se nos ha enseñado que debemos recordar 1856 y los héroes que cayeron en las batallas que conmemoramos. Por supuesto, los mayores héroes de esa historia fueron el Presidente Juanito Mora y el soldado tamborilero Juan Santamaría. Son héroes porque, como Santamaría, dieron sus vidas por salvar las de muchos otros o, como don Juanito, fueron traicionados por quienes querían salvar intereses mezquinos.
Pero véanlo bien, son héroes por dar la vida y esto último es lo que me lleva a pensar en Pero véanlo bien, son héroes por dar la vida y esto es lo que me lleva a pensar en los héroes de la historia que estamos escribiendo hoy. Y sí, claro, pienso en todo el personal de salud, que está hoy apostado en las trincheras cual soldados a la espera del ataque de los filibusteros, todos dispuestos al máximo de los sacrificios. Ellos son los que están apostando todo, como dije al inicio, pero también más. Piénsenlo, no solo arriesgan sus vidas, también las de sus seres cercanos y todo por salvar las vidas de los muchos que nos encontramos atrapados en esta tragedia.
Lo que no me parece y debo denunciar es que haya personas indolentes y poco empáticas que se portan como aquellos filibusteros que cargaron contra el ejército de soldados costarricenses en 1856, solo que sus balas son las gotículas de saliva cargadas con SARS-CoV-2 y la indisciplina del occidental por la que nos creemos superiores. Peor aún, se comportan como aquellos que traicionaron a Juanito Mora, poniéndolo en el patíbulo y disparando sus fusiles en un acto vil, porque desprecian las vidas de nuestro personal de salud, de nuestras personas mayores y de muchos otros que podrían verse obligados a pagar los deseos egoístas de quienes prefieren ir a pasear, reunirse a beber y hacer caso omiso en forma indisciplinada y egoísta.
Yo no quiero recordar héroes. Serán personas que conocemos. Podrían ser hasta nuestros
Yo no quiero recordar héroes. Serán personas que conocemos. Podrían ser hasta nuestros familiares cercanos. Preferiría recordar que el personal de salud casi no fue exigido porque todos acatamos las disposiciones del distanciamiento social y así recordar que en abril de 2020, todo un pueblo hizo el milagro de contener una pandemia nunca antes vista. Ese es el milagro que espero que hagamos, ese es el milagro que debemos hacer.
¿Podremos conmemorar este abril de 2020 como aquel de 1856?
NOTA: Mañana volveré a publicar datos estadísticos.